Ayer fui a cumplir con los requisitos de rutina para que las nenas sean matriculadas en el tercer y en el décimo grados de las escuelas (sí, acá está el décimo grado). Ellas irán a escuelas públicas, entonces la elección del colegio no está a cargo del estudiante ni de su familia: los niños son asignados a la escuela que les corresponde según la región geográfica en la que viven. Así que si uno quiere que su hijo vaya a una escuela "x", tiene que averiguar adonde están ubicadas, qué áreas sirven, y mudarse para allá.
La pre-inscripción se realiza por internet: el condado de Forsyth cuenta con un sitio que acepta el registro para cualquier de las escuelas del condado, en donde se encuentra toda la información posible y necesaria. Los requisitos básicos para la inscripción informados en el sitio web fueron: un comprobante de residencia, tarjeta de vacunación de las dos reconocida por el Departamento de Salud de Georgia y un examen dental, auditivo y visual actual, también certificado por ellos. Uno puede realizar los estudios con cualquier medico, pero los tendrá que validar en ese Departamento.
Como ya he aprendido, acá no hay salud pública. Por lo tanto, aunque el procedimiento que se realiza para ingresar en una escuela pública sea provisto por el Estado, hay que pagar por ello. Yo pagué $25 por cada una, y fui atendida en un lugar limpio, organizado, relativamente nuevo, en buen estado. La gente que trabaja allá habla inglés y español perfectamente, y para mi sorpresa, a pesar de que las tarjetas de vacunación de mis hijas están escritas en dos idiomas diferentes (ellas fueron vacunadas en Brasil y en Argentina), ellos no tuvieron problemas para entender qué vacunas les fueron dadas, en qué fechas, y transcribirlas en su informe oficial. También para mi sorpresa, a pesar de ser extranjeros, no me pidieron ninguna traducción especial ni sello de aquí o de allá, tampoco tuve que esperar horas en una fila interminable. Llamé antes para informarme, fui sin cita previa, me atendieron y yo volví a casa una hora más tarde con todo lo que necesitaba.
Mi experiencia no fue la misma para obtener la licencia de conducir. En general, a los estadounidenses y a los adolescentes que están sacando el permiso por primera vez se les da una cita por teléfono o internet. Pero en el caso de personas que ya tienen una licencia de otro estado o país, es por orden de llegada. Yo me había informado previamente por internet, pero no mucho. Así que fui, me pidieron que llenara un formulario, me dieron una contraseña y me pidieron que esperara. Aunque el lugar también es del Gobierno, también se veía limpio, ordenado y bien cuidado, pero había mucha gente esperando para ser atendido. La espera puede ser de un día completo, y a veces puede ser necesario regresar al día siguiente para hacer lo que no se pudo hacer en el primer día. Pero en el momento de tu llegada, te avisan y te preguntan si estás dispuesto a esperar y correr el riesgo de no ser atendido ese mismo día. Uno elige. Las personas sin cita previa empiezan a llegar las 7:30 am (el lugar abre a las 8) para asegurarse de que serán vistas el mismo día, porque la prioridad son los que tiene cita, y los que no la tiene, serán vistos, si posible.
Acá, la licencia de conducir tiene el mismo valor de identidad a nivel nacional que tiene en Brasil. Te permiten conducir con una licencia que no sea de Georgia hasta por 30 días. A partir de ahí, si te para la policía, tendrás problemas. Aun siendo un conductor experimentado, con una licencia de otro país, no te dan una licencia de conducir local sin que apruebes dos pruebas teóricas y una práctica. Las pruebas teóricas consisten de 20 preguntas cada una, respondidas en una computadora, de multiple choice, y uno tiene derecho a 5 errores en cada una para ser considerado aprobado. La prueba práctica sos vos y el instructor en tu auto, primero en el estacionamiento del lugar, después en la ruta. El problema es que por más experimentado que seas, si sos de otro lugar, las reglas no son las mismas, y todavía está el idioma de por medio, que es un factor que complica. En Brasil, por ejemplo, para estacionar se suele prender las balizas. Acá yo iba haciendo lo mismo cuando el tipo me pregunta qué estaba haciendo: no debemos prender las balizas cuando se estaciona el auto.
De todos modos, yo aprobé tanto las pruebas escritas cuanto la práctica. Pero tuve que ir dos días para completar todo el proceso. Una vez completado, en el mismo momento te dan una licencia temporaria, válida por 30 días, y te avisan que la definitiva te llegará por correo en las próximas 4 semanas. A la semana siguiente la mía me llegó. El servicio al final, también fue cobrado: $20, pagados con tarjeta de crédito al final del proceso. Sin embargo, uno sólo paga esta cuantía una vez, cuando te dan la licencia. Si uno no aprueba, no te cobran nada: volves la semana siguiente para intentarlo de nuevo.
Para obtener el Número de Seguro Social, que es tu identidad única y personal para todo lo que se refiere a crédito en los EE.UU., también fue más rápido y más fácil de lo que yo pensaba. Cada grupo de zip code tiene una oficina que le atiende. En la nuestra, no había nada de espera. No tuvimos que pedir turno ni que llegar temprano. Llegamos a las 3 pm, nos dieron un número, fuimos atendidos por una agradable señora que hablaba Inglés y Español, y en media hora estábamos volviendo a casa. En 10 días la tarjeta de Seguro Social nos llegaba por correo. Esto fue sin ningún costo.
La próxima semana voy a ir a la escuela de las nenas para completar la inscripción. Para ese entonces sí tengo que llevar los documentos traducidos: acta de nacimiento, la custodia de Gabriella, la prueba de residencia y los exámenes médicos que hemos hecho ayer. Para eso, sí tuve que pedir una cita. Pronto contaré que tal fue esa experiencia...
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